Maria Lucinda

Hoy me entere de tu desaparición física!

La noticia me golpeo profundamente,

Fuiste una rara Avis, Una joya valiosa,

Amiga, Colaboradora y Excelente compañera en los Encuentros.

A pesar de los golpes recibidos en tu vida,

siempre mantenías una sonrisa en tu rostro.

Confiaste en el Señor sin restricciones ni apegos materiales.

Pero por sobre todas las cosas.

Fuiste y seras siempre nuestra Buena Amiga.

Ese tipo de amistades tan escasas hoy en día.

Supiste escuchar y nunca nos juzgaste o censuraste.

Con cuanta ansiedad esperamos cada año el Encuentro.

Esos tres días en los que sabíamos que ibas a estar

y que podríamos compartir un Cafécito con Tortita

mientras charlábamos.

Este año en el Encuentro,

El sagrario estará mas acompañado,

se que tu estarás a nuestro lado,

solo que en el plano espiritual,

intercediendo por todos nuestros hermanos.

Dios te bendiga Maria Lucinda.

Hasta que nos volvamos a encontrar.