Santo Rostro

En la Población de La Grita, Estado Tachira, muy cerca de el lugar en donde se han venido efectuando las manifestaciones de mayor violencia en la ciudad, apareció en la roca de la montaña el Sereno Rostro. Mucho revuelo ha causado entre los fieles del Santo Cristo de la Grita esta aparición, y no es para menos ya que el parecido con el rostro de la imagen del crucificado de la Grita es impresionante. Ahora, sea obra de la naturaleza o sencillamente efecto de alguna "casualidad" (No creo en casualidades, todo en este mundo tiene su razón), se me viene a la memoria el Salmo 118  al que hace mención Jesús en el Evangelio según San Mateo, 21, 42:

 Les dijo Jesús:

—¿No han leído nunca en las Escrituras:

»“La piedra que desecharon los constructores
    ha llegado a ser la piedra angular;
esto es obra del Señor,
    y nos deja maravillados”?

Vivimos un tiempo en el que la falta de Fe ha alcanzado niveles sorprendentes, y el mundo quiere construir una sociedad exenta de valores. Los  Únicos Ideales validos para esta sociedad son el tener, el poder y el placer. Un buen amigo me dijo en una ocasión que: "Lamentablemente el Hombre cuando deja de creer en Dios, cree en cualquier cosa que le pongan al frente". Contemplo entonces ese rostro sereno y esa frase  de la piedra angular, resuena en mi mente, y solo me queda reconocer que Nuestro Señor Jesucristo, nos lo esta recordando en una forma muy gráfica y espectacular. El es La Piedra Angular que han desechado los que están construyendo el mundo., El es la Pieza clave que cierra el arco, uniendo ambos extremos y confiriéndole su extraordinaria fortaleza. Confiemos plenamente en el Señor ya que El no solo es el creador sino que es el Dueño de todo. Nosotros solo somos simples administradores temporales de sus bienes, y tarde que temprano rendiremos cuentas ante el Dueño de la Mies. Ojala que Reflexionemos en estos momentos sobre la situación que hemos generado al apartar de nuestras vidas a Jesús La piedra Angular. Un Abrazo y Mil Bendiciones,  ojala que de verdad seamos mañana dignos de sus Bendiciones. Sinceramente Edgard Luis Aristizabal Perez